27 años no me han preparado para estas cosas, las repeticiones,las moralejas, ya no tienen efecto. Porque no sé qué es peor, si la ausencia o la presencia ausente, porque no me acostumbro como dice la madre,a no poder sentir como la persona grande que supuestamente soy, porque en vez de avanzar y comportarme como una adulta responsable, me vuelvo pequeña e irresoluta.